El Délirium Café es un "templo" de la cerveza que hay que visitar. Situado en un callejón sin salida a un paso de la Grand-Place (Impasse de la Fidélité 4, 1000 Bruxelles) este bar, que de noche no se cabe entre la juventud que aquí viene, tiene a disposición del cliente unas 2500 cervezas del mundo entero. Las belgas están casi todas.
Os aconsejo probar todas las de barril (unas 20 creo).
Si vais ya de tarde-noche no os desengancharéis tan fácilmente.
A vuestra salud ! ! !
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